ECCE HOMO II IN NEW YORK

Me llamo Llorenç Benedito. Nací en Castellón en 1860 y ahora me estoy muriendo en mi propia cama el 14 de junio de 1938. Las campanas de mi entierro son las bombas de los nacionales que se acercan. Me dijeron que al morir se ve la vida entera. Me dijeron la verdad. No me espanta la muerte ni el encuentro con Dios. Pero aguaita sin tregua la pregunta sobre lo que dejo aquí abajo cuando las bombas callen y termine esta sucia guerra unos contra otros en nuestra propia tierra. Al mundo he dado dos hijas e inmensos arrozales.